El viernes amaneció toda Vitoria cubierta por un manto blanco que parecía terciopelo, yo me asomé a la ventana y pensé: Día predecible para mi boda, ya que siempre he dicho que el invierno es la época preferida por mi, pues ahí lo tienes Isabel me dije invierno con nieve y todo.
me vestí y bajé a la peluquería, después llegó Eduardo a buscarme y fuimos al fotógrafo, nos sacó un montón de fotos, y elegimos entre ellas cinco para nosotros y tres copias una para los padres de Eduardo, que ya lo sabían, otra para mi hija, y otra para mi hijo, que por cierto llamó por la tarde para felicitarnos, nos dio la enhorabuena, y nos mandó besos para todos.
y allí nos fuimos al juzgado, a la capilla para bodas que tienen en la parte de atrás, llegamos y la puerta cerrada, yo empecé a llamar con los nudillos y nada y empezaron a llegar otros novios al recinto, antes de eso se me olvidaba sacamos fotos en el parque con la nieve de fondo, era precioso, os ponemos una foto de recuerdo para que veáis cuanta nieve había.
Ya veis todo nevado. En fin por fin abrieron las puertas de la capilla, pero nos dieron que entráramos a medida que nos tocaba, yo le pregunte si nos daba tiempo a tomar un café a lo que nos djeron que si, enfrente hay una cafetería y allí nos fuimos, el caso es que la chica que estaba para llamar a las parejas me hacía señas a mi de que nos tocaba y yo no me daba cuenta al final fuimos para la capilla, y nos dijeron que si hacíamos fotos no les sacásemos ni a la juez de paz que esaba para casarnos ni al secretario, todo fue muy rapado, leyó no se que del código civil, se le oía muy mal, yo entendí del código civil articulo 76 o 73, nos pusimos las alianzas Edurdo se volvió a mi y me dio un beso a todo esto mi hija y su pareja nos hacían fotos y mas fotos y ahí acabó todo, al saliera Vitoria seguía cubierta por un manto blanco que parecía terciopelo, nos miramos y en esa mirada nos dijimos bueno "ya estamos casados", hacía mucho frío, mi recuerdo es ese " el frío" y no nos deslizamos en trineo hasta el juzgado porque no tenemos que sino, je, hubiésemos ido en al trineo como PAPA Noél va ha llevar los juguetes a los niño. Mi Akira, la Princesa Blanca sigue durmiendo en su camita al calor, y COLORÍN COLORADO ESTE CUENTO SE HA ACABADO.
AKIRA "LA PRINCESA BLANCA"


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